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A una hora del centro de Asturias está San Pedro de Paredes (Pueblo Ejemplar de Asturias, 2001), donde se puede iniciar una ruta de 5h30’ hacia las foces del Esva (Paisaje Protegido), aunque lo recomendable es dar un pequeño paseo junto al río y regresar a comer un pote de berzas en el chigre rural Casa del Obispo, para después ver tranquilamente las foces desde el pueblo de Bustiello, como les indico a continuación.
A 2 km. de San Pedro de Paredes está la aldea de Bustiello (al fondo de la foto), donde deberán dejar el coche en el parking del bar El Suco, junto al río, e iniciar desde ahí, a pie, la sencilla ruta de 1h45’ (total, ida y vuelta) a las míticas foces del Esva.
En el alto de las montañas que rodean a las foces, se pueden ver algunas casas donde vivían los vaqueiros de alzada, pueblo de la Asturias mítica, que sufría el aislamiento y la marginación de una sociedad que los consideraba una raza casi maldita. En los pueblos próximos de Naraval y Folgueras del Río pueden visitarse casas y museos vaqueiros, de finales del siglo XVIII.
La suave y agreste ruta de 45’ nos permite ver los meandros del transparente y salmonero río Esva, encajonado en pretiles rocosos de hasta 200 m. de altura con abundante vegetación autóctona y una serena y natural belleza, que nos hará disfrutar del mágico entorno.
Impresionante visión de los acantilados de las foces del Esva, a 20’ de la finalización de la suave, desconocida y sorprendente ruta, cuyo emocionante camino es estrecho pero no peligroso y de una dificultad media.
Al llegar a una antigua presa finalizan los 45’ de la ida a este Paisaje Protegido de las foces del Esva, debiendo desandar el camino hasta Bustiello y desde ahí, ir a Navelgas (Pueblo Ejemplar de Asturias, 2003), donde deben visitar un magnífico museo sobre la historia de la extracción del oro en dicha zona,.
El puerto de Luarca es la estrella marítima occidental de la desconocida comarca vaqueira. Desde su recogido y activo puerto, les recomiendo ir al típico barrio de pescadores de El Cambaral en el que se encuentra la mesa de mareantes o navegantes, donde ese histórico gremio decidía según el estado del mar, si salían a pescar o no.
El puerto de Cudillero es el emblemático puerto oriental de la comarca vaqueira que limita al sur con Allande y Tineo. Desde sus cercanas brañas de invierno solían alguna vez acercarse al puerto para ver un manjar que ustedes deben probar: la merluza del pincho de Cudillero, pídanla ñañada y a la plancha, es la especialidad del restaurante El Pescador en El Pito (zona alta de Cudillero).
En la iglesia parroquial de San Martín de Luiña, debajo de uno de sus bancos, está escrita la frase discriminatoria contra los vaqueiros de alzada “no pasar de aquí a oír misa los vaqueiros”, quizás fue la cruel venganza de un clérigo indigno, que no aceptó que no pagaran diezmos a la Iglesia debido a su pobreza. A pesar de la afrenta, siempre mantuvieron su fe cristiana y la devoción a la Virgen del Acebo, su protectora.
Desde San Martín de Luiña, para que puedan entender el medio hostil en el que desarrollaban su vida dura y trashumante mis admirados vaqueiros de alzada, les recomiendo que se acerquen por una buena carreterina (de la que se deben abstener los que tengan miedo a las alturas) a las brañas vaqueiras de invierno de Brañaseca y Busfrío. Quizás mi foto con la llanura de Oviñana y el cabo Vidio al fondo sobre el mar sea explicación suficiente.
A medio camino entre Luarca y Navelgas, junto a la carretera, podrán ver la braña de verano de Caborno que junto con las de Busmourisco, Busindre y Aristébano (donde se celebra cada año el último domingo de julio, el festival vaqueiro y de la vaqueirada) forman un triángulo mágico para el mundo vaqueiro. El famoso gaitero asturiano Hevia se inspiró en la braña de Busindre para dedicarle el tema “Busindre Reel”.
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