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Nava, la Villa de la Sidra, situada en un pequeño altiplano de 300 m. de altura, bajo la falda de Peña Mayor de 1.144 metros atesora un gran número de bellezas naturales que la han convertido en un rutilante rincón turístico. Sus cómodos alojamientos y casas rurales les facilitaran de una forma placentera adentrarse en el nuevo mundo de la Gastro-Naturaleza de la Sidra, conocerán su Museo y prestigiosísimos Llagares (bodegas donde se produce la Sidra) y saborearan en noches sin final un ambiente festivo sin parangón, sintiéndose rodeados del tintineo que produce la sidra en los vasos que les servirán tan doctos escanciadores y escanciadoras; no en vano en la Sidrería la Barraca están las dos primeras mujeres que ganaron el más prestigioso concurso de Escanciadores de Asturias. En las siguientes fotos les recojo una pequeña parte del espectáculo natural que les espera.
A un bellísimo paseo de 2 Km. desde Nava, se encontrarán con esta panorámica natural exclusivamente para Gourmets de la Naturaleza con mayúscula. A pesar de mi objetiva imparcialidad, les sugiero que intenten alojarse en alguna de las siete habitaciones del www.hotelfuensanta.com, me agradecerán que les haya dado la idea de poder vivir una sencilla y romántica experiencia, en la Comarca de la Sidra. (El hotel es un edificio verde que se ve al fondo derecha de la foto)
Piloñeta es una aldea de cuento rural, bajo lo pies de Peña Mayor. Nava, además de los buenos hoteles Villa de Nava y Prida, está rodeada de unos treinta alojamientos rurales con nivel. Al estar protegida la zona por las Sierras del Sueve, Peña Mayor y el Fario, las rutas de media montaña aptas para todos los públicos, son casi interminables y al estar en el centro de Asturias pueden ver todo muy cerca.
Nada más salir de Piloñeta, verán en el fondo del valle de río Pra, a la izquierda, la hendidura por donde discurre el Río de la Peña. Esta pequeña montaña situada al lado de Peña Mayor que se atisba al fondo derecha de la imagen, es la que tendremos que rodear en esta delicatessen de Ruta.
A 800 metros de Piloñeta, en un área recreativa cerca de un molino en el río Pra, se inicia la idílica y cómoda “Ruta de la Ribera de Río de la Peña”, son casi 5 Km. que se les pasarán en un suspiro, ya que es apta para todos los públicos, incluyendo niños que anden un poquito, háganla despacio y abran bien sus ojos para facilitar el archivo de su recuerdo. GPS: 43º 20’ 30” Norte y 5º 30’ 9” Oeste.
Mientras disfrutan con la belleza primaveral naciente de la Ribera del Río de la Peña, les recordaré que otro gran atractivo del paraíso perdido de la aldea de Piloñeta es el Restaurante Chigre rural PEÑAMAYOR, he escrito su nombre con mayúscula, por la autenticidad gastronómica que practica su guisandera propietaria Tel.: 985 716 810, la reserva previa es obligada al ser un pequeño y sencillo local con muchos admiradores, en mi Guía de restaurantes hay un comentario más extenso de sus creaciones culinarias.
Deberán cruzar por el puente de ese viejo molino para llegar a entender la filosofía del sobrehumano esfuerzo por mínimamente alimentarse que tenían que hacer los antiguos pobladores de estos singulares retazos del pasado rural astur, agradeciendo al destino lo mucho que disfrutamos.
Yo siempre recomiendo lo que ustedes mis amigos de sobra saben; bastones de apoyo y zapatos goretex que en el caso de esta ruta no son necesarios, pues como ven, a pesar de en algunos tramos discurrir el camino por las riegas que alimentaban de agua los molinos harineros, al estar orientada al mediodía es una ruta con un piso donde el barro brilla por su ausencia.
La ruta como ven por las marcas paralelas blancas y amarilla, no tiene la más mínima posibilidad de pérdida, cuando vean al fondo el tercer molino derruido, sigan las indicaciones e inicien por la derecha una suave ascensión con vistas, rodeados de las más originales variedades del tradicional sotobosque astur (hayas, avellanos, abedules que junto a los arces y fresnos de la Ribera, casi convierten en lienzos, por su belleza, alguna de mis imágenes).
Al final de la pequeña cuesta está el alto de la Cipresta y desde ahí iniciaremos por una pista hormigonada, atravesando un pequeño pinar, el descenso hacia el río Pra que cruzaremos y a 200 metros aparecerá el Masai-Mara de la aldea de Gradátila. Aunque yo, humildemente, susurro bien a los caballos y a los buitres, no pude conseguir que se uniesen a las ovejas y vacas en esta foto familiar, que dedico a todos los menores que les acompañen viviendo esta maravillosa experiencia.
El edificio que se ve en la parte izquierda de la foto es el hotel Fuensanta, del que les hablaba en la foto segunda del álbum, por mucho que les pueda decir la imagen es apabullante. Cuando se alojen en esta zona no olviden visitar, previa reserva de mesa y excelente comida casera a los Tel. 985 717 333 ó Móvil 665 124 264, en plenos Montes de Peñamayor el Bar Chigre de altura Les Praeres, es un lugar sorprendente al que se accede andando 4 Km. o en coche por una buena pista de montaña que se inicia a 500 metros de donde hemos empezado la Ruta de la Ribera del Río de la Peña (los que padecen el mal de alturas o tienen coches anchos, les recomiendo que no suban), y recuerden que deben conocer también la ermita de San Antonio y así nunca perderán nada en ningún viaje, según el dicho popular que siempre sólo recoge las verdades.
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