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Excursiones por Asturias Rutas por Gijón Gastronomía de Asturias

 
 

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Suave ascensión desde Oceño a las Majadas pastoriles de Trespandiu y Braña de Carraspión, para conmemorar el Solsticio de Verano de 2010, viendo desde el Collado Horcada de Las Compliceras una increible aparición ante mis ojos, del Picu Urriellu o Naranjo de Bulnes

 
 

 

La nueva y ancha carretera hasta la bellísima aldea de Oceño en el Concejo de Peñamellera Alta, les brindará la posibilidad de vivir en 4 horas (ida y vuelta) una excursión sencilla, apta para todos los públicos, visitando las brañas pastoriles de Trespandiu y Carraspión y al Mirador al Urriellu o Naranjo de Bulnes en el Collado Horcada de las Compliceras. Para los más deportistas, hay una ascensión más selectiva a la Majada de Trespandiu, cruzando el río Cares, por el Puente Romano de La Vidre, junto a Trescares y salvando un desnivel de 630 metros, en dos horas llegarán a sus cabañas pastoriles.

Les brindo a través de las numerosas imágenes, el recorrido virtual a mi lado, sin cansarse lo más mínimo, pero espero disfrutando al máximo.

Oceño está a 4 Km. del cruce junto al río Cares, y a 490 metros de altitud.

Para llegar a la Braña de Carraspión a 910 m. de cota, hay 4,4 Km. de buenísima pista apta para vehículos todo-camino, pero al ser en tramos muy estrecha no se la recomiendo hacer en coche. Andar es cardiosaludable y se sentirán vivos y más felices con el paseíto.

De la Braña de Carraspión al Mirador del Urriellu en la Horcada de Las Compliceras hay una mini subida de 20’, pero las vistas que podrán disfrutar son para no olvidar.

El lunes 21 de Junio, sin encontrarme con ningún humano, comparto la soledad que puedo disfrutar desde siempre, con la cabaña ganadera de estas Brañas mágicas del Concejo de Peñamellera Alta.

En Oceño, hay una Casa de comidas muy recomendable pero sólo por encargo, Casa Alfonso, tel. 985 415 846, lean el comentario en mi Guía de restaurantes.

Su dueño Alfonso, es hijo y nieto de dos supermíticos guías asturianos de Los Picos de Europa, Víctor Martínez, su abuelo y Alfonso Martínez, su padre, que fue la persona que más veces ascendió el Naranjo de Bulnes, 200.

Lean en Internet, la vida de estas estrellas, que siempre ascendieron al Urriellu, sin necesidad de clavar en las calizas paredes del Naranjo de Bulnes, ningún hierro, pegándose a la vertical roca como lapas humanizadas.

En la zona, muy cercanas, hay dos Casas de Comidas fenomenales, en Trescares, Monte Río y en Niserías, Casa Julián, los comentarios y teléfonos están en mi Guía.

La terraza sobre el Cares del Rest. Monte Río "Casa Pancho" (Tel. 985 415 714), es romántica al máximo y superrelajante, con una cocina muy bien elaborada.

Mi menú habitual es una tacita de sopa de hígado, ½ ración de patatas rellenas, ½ ración de cabritin guisado, una ensalada de lechuga y cebolla y de postre café con leche acompañado de una tarta de queso, excepcional; por encargo, el sencillo arroz con costilla de cerdo está de rechupete.

Ser Gourmet desde el s. XIII, tiene sus servidumbres pero también sus placeres y así ayudo de paso a ir educando sus jóvenes paladares, mis amigos.




En el Barrio de Mildón, junto al río Cares, a 5,6 Km. de Arenas de Cabrales, se accede por la PA-3 al remoto pueblín de Oceño.





La nueva carretera PA-3 es ancha y sin peligro. Sus vistas sobre la Foz o Desfiladero por donde fluye el Cares son únicas.





Desniveles del 12 % pero belleza visual infinita.





Pequeñas brañas pastoriles sobre el mítico río Cares.





Subir a Oceño es ascender a uno de los paraisos de Peñamellera Alta.





Estas laderas pétreas son el paraíso de las cabras.





Arenas de Cabrales se ve al fondo de la foto.





Después de 4 Km. aparece el altiplano de la aldea de Oceño.





La iglesia de San Juan del s. XVI, está ligada a los nobles Sres. Mier, gobernantes de esa zona.





Tronco de uno de los dos tejos centenarios que hay junto a su Iglesia.





Dicen las leyendas que hasta la sombra del tejo es nociva, pero no para todos.





En Oceño se produce también Queso de Cabrales, que curan en cuevas.





Aunque hay una antigua senda, subiremos por la pista hasta la Majada de Trespandiu.





Vista retrospectiva de Oceño, el Shangri-la de Peñamellera Alta.





Las cabritinas de Peñamellera Alta, son una exquisitez gastronómica.





Al fondo montañoso se atisban los Picos del Macizo del Picu Urriellu.





Espero que no se quejen de mi exposición fotográfica pastoril.





Los muros de piedra enmarcaban los límites de las propiedades.





En la primera majada o de Jaces, ya se puede ver la pica del Urriellu.





Las cabañas de la Majada de Jaces, son bellísimas.





Hemos subido por la pista, ya que el antiguo camino tiene tramos con barro de las recientes lluvias.





Hay innumerables sendas ganaderas a la busca de los pastos del verano.





La buena pero estrecha pista sigue ascendiendo hasta la Majada de Trespandiu.





La niebla está empezando a intentar jorobarme las fotos.





Úlitma visión de Oceño, que está situado a 490 m. de altitud.





Los caballos pastan junto a la fuente y abrevadero de Trespandiu.





Cada animal tiene su propio espacio y conviven con hermandad.





Cabañas ganaderas sobre el Desfiladero o canal del río-arroyo Rubo.





La Majada de Trespandiu esta a 770 m. de altitud y a 2,4 Km. de Oceño, que se andan un una hora.





He querido recibir al solsticio del 2010 en la soledad de la joya natural de las Majadas de Oceño.





Si no se relajan con estas imágenes, yo ya no creeré en nada ni nadie.





Seguimos por la pista ascendente hasta la Braña de Carraspión, por esta ladera de sueños.





Observen como la vaca disfruta de los altos pastos.





Al ascender vemos las cabañas de Trespandiu, la Foz o Desfiladero del Cares y la Sierra del Cuera, al Norte.





Los muros de piedra enmarcan las praderías ganaderas.





La pista ascendente nos muestra un tejo junto a las cabañas, el Desfiladero del Cares y la Sierra del Cuera al Norte.





Un pequeño hayedo bordea la pista ascendente.





Sendas ganaderas de Trespandiu, sobre el Desfiladero del río Cares.





Las hayas nos ofrecen su refugio ante los rayos del Sol.





Estamos ya muy cerca de la Braña de Carraspión.





Braña ganadera de Carraspión, a 910 metros de altitud.





Por la pista hemos ascendido 4,4 Km. desde Oceño, en algo menos de dos horas.





Me dirijo al paso que se ve a la izquierda de la foto, donde hay una caseta de la traida del agua a Oceño.





Los pequeños ''chatos'' o terneritos descansan bajo la protección de sus mamás.





Encima de las derruidas cabañas vuelan los Buitres.





La colonia de buitres impresionará a sus hijos pequeños.





He cruzado la horcada o paso de Carraspión y por esa senda me dirijo a un lugar increíble.





Ese precioso pico que bordea la senda se llama Cuetu de Carraspión.





Aquí escogeremos el caminito ascendente de la derecha.





A veinte minutos, desde la Braña de Carraspión, viviré con Vdes. una gran emoción.





Hemos llegado al Collado u Horcada de las Compliceras.





Estamos a 998 m. de altitud, relájense con esta visión, sólo para dioses y mendigos.





La visión del Macizo Este del Picu Urriellu me está emocionando.





Las nubes celosas no quieren compartir tanta belleza natural.





Los 2519 metros del Naranjo de Bulnes impresionan por su esbelta e irrepetible belleza.





Vista descendente de las solitarias cabañas pastoriles.





Han tenido la gran suerte de vivir a mi lado la visión de una de las mayores bellezas de la naturaleza astur.





Según la dirección del viento, se forman con el calor, nuevas masas nubosas.





Camino de vuelta hacia el Cuetu de Carraspión y la canal del río Rubo, que fluye sus aguas en el salmonero Cares.





Me despido de mis nuevos amigos de la Majada de Carraspión.





Vista de la pista descendente entre las cabañas de Jaces.





Después del descanso, las vacas siguen disfrutando de la nueva hierba, en las laderas montañosas de Trespandiu.





He duplicado dos imágenes finales de la Majada de Trespandiu, por el camino que les lleva encima del desfiladero del Cares.





Acerco la imágen un poco para que disfruten esta serena belleza natural.





Los poderes fálicos de este macho cabrío ayudan a dar vida a las cabras autóctonas, que producen una leche de inigualable sabor al transformarse en los quesos de Cabrales y Peñamellera Alta.





Última visión de uno de los dos tejos que rodean la Iglesia de San Juan en Oceño.





Las raíces romanas del Puente Medieval de la Vidre, junto a Trescares, nos recuerdan que por la calzada de Caoro, sus Legiones trataban de colonizar a su indomables pastores, pero no pudieron.





El día 21 de Junio de 2010, viví en soledad, pero con su calor, una jornada que vale por un siglo, de los muchos que la diosa fortuna me ha permitido disfrutar. A media tarde, en la redecorada y preciosa terraza sobre el río Cares del Rest. Monte Río "Casa Pancho" (Tel. 985 415 714) de la aldea de Trescares, hice como les digo en el guión, mi frugal almuerzo-cena: una tacita de sopa de hígado, ½ ración de cabrito guisado de Peñamellera Alta, una ensalada de lechuga y cebolla y de postre, la tarta de queso con un café con leche. Hoy nadie ni nada ha turbado mi paz. Adiós amigos, la Naturaleza salvaje Astur os espera y podemos compartirla.

 
     
     

 
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