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Restaurante ARBIDEL (C/ Oscura, 1 - Ribadesella): Tel. 985 861 440 & 629 268 378. www.arbidel.com. Cierra domingo noche y lunes.
Imprescindible reservar, ya que solo tiene ocho mesas en su coqueto restaurante y que se amplían otras cuatro cuando el tiempo mejora en su acogedora terraza exterior.
Antes que nada debo pedir disculpas a mis muchos seguidores por haber tardado tanto en disfrutar las sensaciones de esta sencilla Casa de Comidas, con mayúsculas, que como les decía en el título del post, me ha emocionado y de la que tenía inmejorables referencias de amigos con alto nivel gastronómico y también de un conocido inspector de la famosa Guía Michelin, que me había hablado con mucho calor hace ya dos años de las bondades de su cocina que finalmente han premiado, otorgándole una merecidísima Estrella.
Su relación precio-calidad es sencillamente imbatible, con un Menú Degustación “Ribadesella 2014” por solo 30 euros: Sólido, Sorprendente, Creativamente variado, Emocionante y Baratísimo. En conclusión, comer en Arbidel es una gozada para todos los sentidos, incluyendo el del ahorro.
Este joven y experto a la vez cocinero asturiano Jaime Uz, les puedo garantizar, fruto de mi casi infinita experiencia gastronómica, que tiene una cabeza muy bien amueblada con el arte innato de haber nacido para realizarse disfrutando en los fogones de su restaurante y haciendo partícipes a sus clientes de su inconmensurable Don, pues este muchacho es un goleador nato de la coquinaria astur que se merece sobradamente todas y cada una de las merecidas loas que le dedico.
Su creciente carta de vinos es más que suficiente, teniendo en cuenta las pocas mesas que tiene y los precios supercompetitivos de su racionalmente diseñada Carta, en que se nota un estudio exhaustivo de los costos de cada una de sus propuestas, para sin bajar ni un ápice la calidad y cantidad del producto, tener los precios finales ajustadísimos, con unos márgenes de beneficio mínimos.
La hostelería es una maravillosa y muy sacrificada profesión vocacional en que uno se enriquece disfrutando con el buen hacer diario y si queremos convertirnos en unos vulgares millonarios por aquello de buscar la presunta seguridad que, dicen, da el vil metal, la solución es jugar de vez en cuando un euro en la bonoloto y esperar con calma la llegada de la esquiva diosa Fortuna; pero este joven Héroe culinario llamado Jaime Uz jamás se arruinará con las virtudes que por suerte atesora, que me imagino deben trascender en su ámbito personal, con el apoyo de su atractiva consorte, Victoria Valdés, que nos atendió de maravilla, ayudada por el buen camarero, Luis Méndez, en los tres almuerzos que disfruté con uno de mis fieles ayudantes el frío y atemporalado mes de febrero del 2014.
Unos días antes de empezar para ustedes, mis fieles seguidores, este esforzado y emocionante Tour Gastronómico en la superatractiva Villa de Ribadesella, mandé de avanzadilla a mi mujer con sus fashion amiguinas, para que me dieran sus también casi-expertas opiniones al respecto y la conclusión también fue en general de lo más positivo.
El estudiadísimo Menú “Ribadesella 2014” que sirven a mesa entera se compone de las siguientes delicatessen: ensalada líquida de maíz y guacamole, tartar de salmón y algas; brandada de bacalao, toffe de tomate y almendras, crema de patata y coliflor con cúrcuma y berberecho; gazpacho de manzana verde, sardina marinada y Pría; tomate raff y cebolla roja en ensalada de anchoas ahumadas y Varé; cuscús trufado con huevo, setas y repollo; bacalao, jugo rustido de pulpo, verdinas y vegetales; carrillera tostada, puré de apio-nabo y remolacha en ensalada; cremoso de plátano, piña confitada, cáscara de limón helada y manzana; migas de chocolate, crema de calabaza y naranja, y helado de yogur.
Impresionante... juego de aromas, texturas y sabores; de diez sobre diez.
Otra de las muchas ideas del buen hacer de este extraordinario guisandero astur, Jaime Uz, es que los platos de la carta que se pueden repartir para hacerse un particular y variado menú degustación entre dos o más personas, los sirven repartidos ya emplatados desde la cocina, con el trabajo suplementario que ello demanda, pero ganan al conseguir una presentación ópticamente más atractiva.
El suave vino tinto Ribera del Duero con cuatro meses de barrica que repetimos los tres días fue Finca Resalso del 2012, por unos razonables 15 euros, y que yo tomaba un poco mezclado con casera por aquello del control exagerado para recaudar en injustas multas, lo que han malversado esta panda de incompetentes e insaciables políticos de la mayoría de los partidos, que nos han arruinado totalmente para los próximos veinte años.
Sin excederse en los vinos, se puede comer para levitar, invirtiendo en su placer de 40 a 60 euros por persona, ya que este singular restaurante es el más de barato del mundo, entre los que atesoran una merecidísima, repito, Estrella Michelin.
Otros platos que probamos de su seductora Carta fueron los bocartes rellenos con suave de Cabrales y vinagreta de manzana y tomate (14 euros); pulpo braseado con parmentier de arbequina y páprika (18 euros); repollo relleno de ibérico con crujiente de manitas y setas (18 euros); arroz cremoso con calamares y cigalitas, acompañado de virutas de Gamonéu D.O. (18 euros); pixín asado con cuscús, caramelo de cigala y tallarines de calamar (25 euros); bacalao con centollo guisado y su pil-pil (23 euros); raviolis de pitu de caleya sobre cigalas fritas y su jugo ligado (28 euros); lomo de cordero relleno, espuma de patata trufada y brotes frescos (23 euros); tarta de manzana caliente y su helado (6 euros); infusión de frutos rojos, espuma de Hierba Luisa y helado de yogur y queso (6 euros); frixuelo crujiente de arroz con leche, crema de limón y helado de canela (6 euros); crema caramelizada de vainilla y helado de cáscara de naranja (6 euros).
Ya veis lo que tengo que sufrir, a lo Pantagruel, e invertir, a pesar de la brutal Crisis que nos han regalado estos Mindundillos electos, para teneros debidamente informados y supermotivados para forzar el necesario Consumo en el irrepetible Paraíso Natural Astur.
Os regalo las imágenes de toda esta vivificante y emocionante experiencia en la preciosa villa de Ribadesella. |
Uno de mis habituales colaboradores, junto a la ría de Ribadesella y que a pesar de ser un extraordinario diseñador gráfico, sensible y educadísima persona, estar dispuesto a trabajar en lo que sea; sufre las dentelladas del miserable Paro que nos han regalado nuestros impresentables políticos, que se merecen, como poco, una nueva e inmensa Bastilla.
Acogedora terraza exterior del restaurante Arbidel, en la calle Oscura del Casco Antiguo de la preciosa Ribadesella.
En el cálido comedor del restaurante Arbidel uno se siente como en casa.
Al ser solamente ocho cómodas mesas, más cuatro en la terraza exterior, la reserva es siempre imprescindible.
Con la ensalada líquida de maíz y guacamole acompañada del tartar de salmón y algas, iniciamos el menú degustación "Ribadesella 2014".
Brandada de bacalao, toffe de tomate y almendras con crema de patata y coliflor con cúrcuma y berberecho.
La sardina marinada y la espuma de Pría (matices de la tierra), antes de bañarla con el gazpacho de manzana verde.
El delicioso gazpacho de manzana verde cubre la sardina marinada que les muestro en la foto anterior.
Tomate raff y cebolla roja en ensalada de anchoas ahumadas y Varé.
Cuscús trufado con huevo, setas y repollo.
Bacalao, jugo rustido de pulpo, verdinas y vegetales.
Carrillera tostada, puré de apio-nabo y remolacha en ensalada.
Cremoso de plátano, piña confitada, cáscara de limón helada y manzana.
Migas de chocolate, crema de calabaza y naranja, y helado de yogur; fue la última delicatessen del menú degustación "Ribadesella 2014".
Bocarte relleno con suave de Cabrales y vinagreta de manzana y tomate; foto de media ración ya repartida en dos platos.
Pulpo braseado con Parmentier de Arbequina y Paprika, 1/2 ración.
Repollo relleno de Ibérico con crujiente de manitas y setas, 1/2 ración.
Arroz cremoso con calamares y cigalitas, acompañado de virutas de Gamonéu D.O. 1/2 ración.
Pixín asado con cuscús, caramelo de cigala y tallarines de calamar, 1/2 ración.
Raviolis de pitu de caleya sobre cigalas fritas y su jugo ligado, 1/2 ración.
Lomo de cordero relleno, espuma de patata trufada y brotes frescos, 1/2 ración.
Tarta de manzana caliente y su helado, 1/2 ración.
Infusión de frutos rojos, espuma de Hierba Luisa y helado de yogur y queso.
Crema caramelizada de vainilla y helado de cáscara de naranja.
Frixuelo crujiente de arroz con leche, crema de limón y helado de canela; fue el dulce epílogo de tres almuerzos memorables.
Sensaciones del paseo junto a la preciosa ría de la inconmensurable Ribadesella.
Espero haberles ayudado a motivarles para vivir pronto la experiencia gastronómica en el restaurante Arbidel.
Les recomiendo, con esta idílica visión en pleamar de Ribadesella, que vean en el álbum 42 de mi web, la sencilla y cardiosaludable excursión al Pico Monfrechu, de 897 metros de altitud (que se atisba al fondo de la foto), en solo cuatro horas, ida y vuelta.
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